Los labios son muy delicados y sensibles. Si va a darles el sol, tanto en la playa como en la nieve, use un lápiz de labios con un factor de protección alto.
Evite los malos hábitos como estirar las pieles de los labios resecos o mojarlos continuamente con la lengua, ya que es la mejor forma de agrietarlos.
Hidrátelos abundantemente con un brillo de labios o un protector labial y procure que sean suaves y blandos.
Un remedio muy sencillo para evitar la sequedad es aplicar un poco de miel que dejará actuar todo el tiempo que pueda. Aclare con agua templada y póngase un poco de crema de coco.
Cuando sus labios estén agrietados y resecos, aplique una crema exfoliante suave para retirar la piel muerta. Aplique después una crema hidratante.
Lave bien los labios después de consumir alimentos ácidos o salados que pueden irritar la piel, como zumo de naranja, limón o pipas de girasol.
Alimentación
Consuma vitamina C y vitamina E. La primera se encuentra, sobre todo, en los cítricos, como el limón, la naranja y la mandarina, pero también en las patatas y las grosellas negras. La segunda se ingiere consumiendo cereales, aceites vegetales, huevos y mandarina. Protege los tejidos orgánicos y favorece la circulación sanguínea.
Algunos trucos para unos labios de película- Aplique un protector en la zona lateral de los labios, ya que también es especialmente sensible a los elementos.
- Para nutrir sus labios, frótelos con una rodaja de aguacate.
- Tenga en su mesita de noche una barra protectora labial o un bote de vaselina. Por muy despistada que sea. seguro que se acordará de usarlo antes de apagar la luz.
- Dése un suave masaje circular con un cepillo de dientes de cerdas muy flexibles.
- Estimule los músculos con un ejercicio muy sencillo que evitará descolgamientos y flacidez: frunza los labios formando una pequeña letra O. Practique a continuación una sonrisa amplísima y luego vuelva a la O. Repita varias veces el ejercicio.
Brillos de labios
Puede elaborar un abrillantador muy suave mezclando 9 cucharadas de lanolina con 1 cucharada de aceite de ricino. Agregue una cucharada de aceite de lavanda para aromatizar.
Protectores labiales
Para curar los labios abiertos, aplique cada noche un bálsamo de miel que puede preparar mezclando 2 cucharadas de miel líquida con 5 gotas de agua de lavanda.
Crema de aceite de coco
1 cucharadita de aceite de coco.
1/2 cucharadita de manteca de cacao.
1/2 cucharadita de aceite de calabaza.
Es ideal para suavizar los labios resecos. Derrita la manteca de cacao al baño María y agregue los aceites, removiendo bien. Cuando aún esté caliente, vierta en un molde pequeño y resistente al calor.
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